Prácticamente, todos los alimentos presentes en la naturaleza tienen propiedades curativas, purificantes y beneficiosas, que ayudan a sanar o a prevenir enfermedades en el organismo. Sin embargo, algunos son esenciales, no deberían de faltar en nuestra alimentación. Entre ellos se encuentran los siguientes:
– Los vegetales verdes: ayudan a prevenir el cáncer, protegen el sistema inmunológico y mejoran la salud de los huesos.
– Frutas naturales: contienen una gran cantidad de líquido, necesario para expulsar las toxinas del cuerpo. Son abundantes en antioxidantes, nutrientes, vitaminas, fibra y fitoquímicos.
– Jengibre: Es una especia que posee muchas propiedades desintoxicantes, mejora la digestión, ayuda a disminuir los niveles de colesterol, previene resfriados y es efectiva para disminuir los coágulos sanguíneos.
– Ajo: tiene un efecto antibacteriano y antiviral, que nos protege de infecciones.
– Pescado (salmón, sardinas, trucha, etc.) y nueces y semillas: Gracias a su alto contenido de Omega 3, son favorables para mantener sanas las arterias y el corazón, y disminuyen la depresión.
– Cilantro: es una hierba natural que ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre, contiene propiedades antibióticas, baja los niveles de colesterol y promueve la salud de los ojos por su riqueza de nutrientes.
Ahora qué sabes esto, ¿qué esperas para empezar a comer más sano?